sábado, 27 de abril de 2013

CIEN POR CIEN QUIQUE GONZÁLEZ


BARTS
26/04/2013
Festival de Guitarra de Barcelona
Avg. Paral.lel,62   21.00 h

Otra noche de concierto con Quique González. Muchas, muchas ganas en las caras de los que se van acercando al Arteria Paral.lel ahora Barts y antes excepcional Studio 54, donde me había colado en alguna noche de aquellas para recordar.
Aforo completo. Bastante puntual saltó al escenario con un Bona nit, Com esteu?. Y empezó desgranando temas de su último disco Delantera Mítica. Un Quique cómodo, relajado, dueño del escenario, seguro, que se fue creciendo a medida que pasaban los minutos y que nos sorprendió y acabó demostrando que aquel concierto era cien por cien marca de la casa, que ese nuevo sonido Nashville le sentaba bien, pero que muy bien.
Dos horas y media de música exultante de buenas vibraciones y con una nueva banda que demostró que estaban a la altura,  Edu Ortega y Pepo López a las guitarras, mientras que dos de los integrantes de Señor Mostaza, Alejandro Climent, ‘Boli’, al bajo y Eduardo Olmedo, a la batería; completan el cuarteto. Casi, casi la sensación de tener el cielo en la palma de la mano.
Poco a poco fueron cayendo uno a uno: La Fábrica, Parece Mentira, ¿Dónde está el dinero?, Viejos capos para continuar con Restos de Estoc, una espectacular Caminando en Círculos, Cuando estés en vena que nos supo a gloria con ese toque de violín. Una Delantera mítica de emoción desatada, otra grande Torres de Manhattan, primera vez que la escucho en directo, No encuentro a Samuel con mandolina y violín.
Luego llego un repaso a los clásicos reversionados con fuerzas renovadas y que nos tocaron el corazón: Palomas en la Quinta, Pájaros Mojados (estilo country Nashville), Hasta que todo te encaje, La ciudad del viento,  39 grados con un Quique animadisimo, en su salsa, recitando fragmentos de Charles Bukowski.
Y uno de los momentos de la noche, ¿Es tu amor en vano?. Pedazo de versión maestro,  escalofriante la gente pidiendo silencio para oír a Quique, otro gritando romántico y sólo su voz aterciopelando la guitarra.
Después comenzaron las dedicatorias personales adjudicadas a mis acompañantes, Emrac y Charlie se quedan con Aunque tú no lo sepas.  Las chicas son magníficas, Kamikazes enamorados, Suave es la noche (utilízame, esta me la quedo para mí, increíble Quique). Miss camiseta mojada, Hotel Los Angeles (rockera y brutal), la trepidante Tenía que decírtelo, la dedicada al poeta Frattarola:  la inigualable Salitre.
Y casi, casi en la última parte cuando teníamos a un Quique que se comía literalmente el escenario Dallas-Menphis, Su dia libre (ya convertida en un clásico y acompañada de silencio sepulcral).
Y para acabar, cuando ya esto empezaba a tocar a su fin,  nos despedimos con un hasta pronto de este gran músico y persona  nos cayeron una espectacular Vidas cruzadas (mi sintonía en el móvil, creo que descubrir esta canción me marcó) y una insuperable Los conserjes de noche.
Y ojala te volvamos a ver pronto por aquí (por Barna), en un café leyendo el Ás, con tu guitarra en un tren a las tres de la mañana, buscando a Samuel, en la ruta  imaginaria a tu Nashville o sentado en la hierba en un simple parque de cualquier lugar que no sea Madrid.
Esta noche hemos disfrutado quizás del mejor Quique hasta ahora. Ya todos sabemos que estás de vuelta.
No te olvidamos, imposible y recuerdos a Cayetana, esa pantera enblemática.

2 comentarios:

  1. Estuvo enorme, enorme. Uno de los grandes. Gracias, Homeless, por esta maravilla de crónica.

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  2. Homeless narrador, perturbador; Homeless pintor, perfeccionista; Homeless coleccionista-de-citas, perspicaz; Homeless lector, pertinaz; Homeless fotógrafo, personal... Pero de todos los Homeless, me quedo con el Homeless cronista -ya sea de viajes, exposiciones, obras de teatro, de cine, de museo... pero especialmente de conciertos pero especialmente de conciertos quiquegonzalianos-.

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