martes, 17 de abril de 2012

IVÁN FERREIRO: PASIÓN EN EL ESCENARIO

Gira: "Confesiones de un artista de mierda"
14 de abril Málaga
Sala París 15
C/ de la Orotava, 27   22.30 h
Nunca llegué a imaginar que vería a este artista en un fantástico concierto en Málaga pero la oportunidad vino de manos de una persona a la que quiero mucho, mi hermana.
Muchas gracias Marta por este regalazo.
Y sí, fue un concierto de aquellos que marcan porque Ferreiro salió a la palestra a por todas con su vinillo en mano y con un “puto placer estar esta noche aquí” como saludo, haciendo referencia a su buen  estado de forma ante la cálida acogida del público de Málaga que le esperábamos sobre las 23.15 h después del telonero malagueño “ La Cena” en la Sala París 15.
Nada más poner los pies en el escenario y comenzar a cantar, el espacio se llenó de este magnetismo, de esta personalidad que este ex-líder de “Los Piratas” (cuántas tardes enganchada a mi reproductor de cassetes escuchando sus temas) nos ha demostrado poseer junto a su potencial como letrista y esa composición musical cargada de filigranas y guiños a la emoción más incontenible de esa noche, convertido ahora en un máximo exponente creador con nota.
Para mí una bestia de escenario que te hace vibrar  y te hace sentir en un momento de vitalidad total con su actuación, con sus palabras, con sus gestos teatrales y con sus comentarios y acompañado de una banda excepcional.
Mi avería y redención particular y mi fuerza recuperada esta noche.
No puedo recrear el setlist original pero intentaré recuperar los mejores momentos de la noche:  Canciones para el tiempo y la distancia, Turnedo, M, Estrella de la muerte, Espectáculo, Abrázame, Mrs. P, Mi furia paranoica, repaso de sus Confesiones de un músico de mierda, y recuerdos de Los Piratas: Promesas, Años 80, Días Azules…entre otras muchas, muchas.
Dos regalos en versión especial: ¿Aha han vuelto?, de los granadinos Lori Meyers y más tarde, Margot de Pereza.
Casi dos horas y media de concierto y este gran músico sin ganas de dejar las tablas, canción tras canción, calentando el ambiente, dando más y más sin parar, quizás tan entregado que no quería interrumpir esta conexión tan estrecha con el público, con aquellos máximos seguidores de sus temas.
Tres bises y la hora del final, una despedida hasta el año que viene y su luz nos abandonó. El público salió de la sala con sonrisas y comentarios de que ya sólo falta un poco menos para gozarle denuevo sobre el escenario porque en nuestra mente nunca dejará de sonar.
Gracias Iván Ferreiro por tu proximidad, por estos momentos, por tu música, por ese genio total que corre por tus venas gallegas.
Hasta pronto.

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