AVISO POR DESALOJO

A pocos días que el año 2009 baje el telón y se queden sólo en el recuerdo las cosas buenas, regulares y malas que nos han sucedido; cuando se acercan estas fechas uno se plantea un examen de conciencia individual para mitigar la ansiedad y la depresión de los propósitos que se quedaron en el tintero.
El uno de enero al despertarnos además de la resaca nos dimos cuenta de que nos seguí acompañando la señora Crisis, de la que no nos hemos separado en estos últimos doce meses. Nos sorprendió una fría tarde de octubre del 2008 y nos está dando cuenta de la decadencia en la que vivimos.
La historia de la Historia nos habla de ciclos y en estos momentos nuestra sociedad se tambalea por la falta de todo tipo de valores y esta situación no se arreglará con dos telediarios y cuatro recortes.
Los políticos nos demuestran que no hay un planteamiento bueno para solventar la situación.
Le fue entregado al señor Barak Obama el Premio Nobel de la Paz por una gestión todavía gestante que nos enfrenta a los mismas guerras que hace doce meses y algunos nuevos conflictos que dividen el panorama entre lo que se debería hacer y lo que realmente se practica.
Celebramos por todo lo alto la caída de un muro: El Muro de Berlín, que dividió al motor de Europa pero construimos nuevos muros de insolidaridad.
Catalunya sometió a referéndum una independencia cuestionada por todos por lo bajito a la espera de una sentencia que ZP retrasa. Pero lo que se prometía como la fiesta del 30% ha tocado la fibra y consumido la ironía de la unión.
El plan E(Estafa) nos ha llenado las calles de obras en algunos casos insostenibles, en otros casos siestas de obreros al calor de los días de agosto y han creado un tráfico de influencias que ha provocado una vez más las protestas vecinales.
Hace pocos días el desastre de la Convención de Copenhangue: los radicales defendiendo unas posiciones duras y los países más desarrollados: las potencias defendiendo su economía.
De aquí a 50 años que nos quedara de esa Tierra que nos lo ha dado todo. Y no quiero ser dramática, no quiero reconvertir este discurso en una utopía inútil, de palabras salidas de un método ecologista ni conectar con las altas esferas del pensamiento estático global.
También hemos tenido cosas buenas: avances en salud, tecnología. Se ha despertado una juventud que parecía muy dormida y comienza a trabajar por un futuro mejor con paso firme.
La generación X se ha hecho mayor, ya cerca de los cuarenta, nos quedan ya lejos las nuevas generaciones que en momentos determinados no entiendo y que me tratan ahora de señora cuando entro en los establecimientos.
El cambio físico es invisible (para algunos de nosotros aunque real) para los que nos movemos en estos cuerpos. No se puede negar la evidencia. Determina nuestra posición real en el mundo.
Nos hemos asentado, echado raíces aunque se incrementa el número de Peter Pans que sueñan con sus pequeños retos y los grandes aventureros que buscan objetivos mejores.
Otro año más con personas que nos dejan. Musos y musas, pintores( Ràfols-Casamada…), músicos (Antonio Vega…), escritores (Benedetti…), actores (Paul Newman…) y tantos otros que me dejo: anónimos o visibles a la luz pública. Los últimos anónimos serán un poco más duros por lo reciente (esta misma semana). También aquí va mi recordatorio para los que lucharon (Cleopatra) y luchan contra el cáncer sin perder la sonrisa, sin perder el ánimo. Todas las historias que pasan día a día por la película de mi vida y que se incrustan en las grietas de mis manos.
Darle las gracias y despedirme de Celia Olivares, que esa 176 páginas que me ha regalado para contar una parte de su existencia imaginaria queden siempre en mi memoria.
Los objetivos personales que se asoman al nuevo cuaderno en blanco los dejo para el 1 de enero del 2010 cuando de nuevo reanude mis torpes y pequeñas incursiones en el mundo de la literatura, en el mundo de todo aquello que me emociona, que me devuelve a mi ciudad.
Esperando encontrarme con miles de historias más que vivir, que aprovechar.
No me propongo nada que no pueda cumplir, quedaron atrás los proyectos sin tocar a tierra, pero espero poder poner mi granito para fomentar un vientecillo suave de buenas vibraciones, que me haga disfrutar de todo y de todos los que me rodean.
Comienza la cuenta atrás…